¡Por fin un reality como la Gente!

Un lindo puterío glamoroso-político se armó en torno al supuesto romance protagonizado por el ex presidente del Banco Central, Martín Redrado, y la neumática Luciana Salazar, o Luli Pop, como se puso ahora. Es que en sus respectivas cuentas de Twitter los tortolos dieron pistas del romance, que luego fue tapa de la revista Gente. Hasta acá todo más o menos cholulamente normal. Pero resulta que primero este tipo dijo esto, lo que fue reproducido en un comentario medio al pasar por la panelista Agustina Kampfer (foto) en “Un mundo Perfecto”, el programa que conduce Roberto Pettinato por América.
Resulta que la Kampfer, además de periodista es la novia de Amado Boudou, el ministro de Economía del Gobierno kirchnerista de Cristina. Y América es un canal privado propiedad del opositor Francisco De Narváez, por lo que la supuestamente inocente polémica por si Redrado es o no es, pasa al plano de lo político, ya que a la mina la echaron los directivos de la emisora por el comentario que hizo sobre el golden boy de brushing y sibaritas costumbres.
Ahora, tras el despido de Agustina, se metió en la discusión el presidente de la CHA, César Ciclutti, quien analizó que “no se nos escapa que esta situación tiene una trascendencia mayor por la pelea política entre dos políticos: el diputado Francisco De Narváez y el ministro de Economía Amado Boudou, novio de Agustina Kampfer”.
En ese sentido, relató que la periodista se comunicó con la organización para explicar que “ella no había tenido ni el sentimiento ni la intención de discriminar a nuestra comunidad, y que ofrecía su ayuda y colaboración”.
“La discriminación no está en las palabras sino en la intención desvalorizante y en el sentimiento negativo de la expresión”, explicó Ciglutti.
El presidente de la CHA recordó además que la ANSeS, cuando Boudou fue su titular, reconoció el pago de la pensión por fallecimiento a las parejas del mismo sexo, “un reclamo de la CHA de más de 12 años”, marcando el antecedente del primer reconocimiento por parte del Estado en un beneficio a nivel nacional.
En cambio, dijo Ciglutti, “De Narváez votó en contra del proyecto de modificación de la ley de matrimonio para parejas del mismo sexo en la Cámara de Diputados de la Nación”. ¡Qué hermoso puterío!