Marín tal vez creyó que la lluvia que suspendió el Superclásico que fue a ver se había venido para Santa Rosa. Y por eso, a riesgo de tormentas, prefirió pegar el faltazo: no asistió -otra vez- a la reunión del consejo partidario que él mismo preside y los chupamedias de Carlos Verna, que son mayoría en ese ente, pusieron el grito en el cielo: se recalentaron con el ex gobernador devenido en kirchnerista y salieron a chicanearlo, pidiéndole que la próxima fecha de reunión la ponga él, así no falta...
Ocurrió esta mañana en el desintegrado PJ pampeano, en el que son muchos los cruces, dimes y diretes.
La mentada "unidad", los abrazos para la gilada, las declaraciones de ocasión entre unos y otros, ya forman parte de un buen recuerdo.
Para el PJ local, la cruel realidad -que es la única verdad- es que Convergencia y la Plural, marinistas y vernistas, ya no se pueden ver ni en figuritas. El PJ tiene su propio Superclásico, plagado de tormentas.
Los dos bandos, sin embargo, insisten en eso de que si no se juntan van derecho a la derrota. "Somos boleta", resume Marín, que de esas cosas sabe.
Tal vez es por eso que Verna teje otra estrategia: la semana pasada empezó a reclutar más intendentes, no sólo de su partido, sino de otras fuerzas. El radical Juan Carlos Olivero fue un intendente útil: le ofreció Parera, la localidad en la que es jefe comunal, como sede del encuentro. Y este martes está programado algo parecido: en Macachín piensan amuchar a los intendentes de la zona sur de la provincia.
Desde ya, Marín no está invitado...
2 comentarios:
malandrin y barba ladron devuelvan toda la guita que se afanaron de la provincia, que vuelva al pueblo de la pampa que tanto estafaron desde el 83 hasta la fecha.
perucas garcas.
Che ¿Dará Borthiry el piné para ser el Aníbal Fernández local?
Publicar un comentario