Los increíbles defensores de la agrupación Servi Trinitatis (Siervos de la Trinidad) tuvieron su propio festejo del Día de la Primavera (Lujuria). El padre Carlos, envuelto en su sotana tableada en tonos beiges, arengó a la masa compuesta por más de una centena de fieles -en su mayoría ancianos- con poses y gesticulaciones muy propias de Don Peperino Pómoro, aquel simpático e inolvidable personaje de Cha Cha Cha.
Parecía una joda, pero era en serio: después de la misa hubo más rezos en la Iglesia Catedral, que, construída con dinero del Estado -o sea de todos los ciudadanos, católicos o no, Servis o no- sirvió para albergar a los tipos y tipas que defienden a dos curas acusados -entre otras cosas- de reducción a la servidumbre, trata de personas, contrabando de dinero y medicamentos (Avaricia).
Los Siervos cantaron cosas raras, seguramente muy propias de sus creencias. Se la agarraron con los medios: dicen que los diarios calumnian, injurian, ignominian no sólo a los acusados Antonio Martínez y Ricardo Latorre sino también al depuesto obispo obeso Fidel Brédice. Cuentan que los religiosos no pueden mirar con odio, pero dio toda la sensación de que exactamente eso transmitían sus miradas mientras oraban largamente, lanzando dardos envenenados y flechas encendidas con sus ojos fijos sobre el blanco que representaban fotógrafos y periodistas (Ira).
En la manifestación no estuvo Juan Carlos Tierno (Soberbia), y a lo mejor eso es noticia. Cuando salieron de la Catedral se juntaron en la Plaza San Martín. El padre Carlos -lejos, el más joven de todos- hizo a la vez de amenizador y arengador. En esencia, dio las órdenes para que los fieles gritaran que viva la Iglesia, que vivan los curas, y que viva viva viva.
Algunas viejas cerraban los ojos mientras cantaban que Cristo es la luz de no se sabe qué, encandiladas por el éxtasis (Lujuria). Como enajenados, había quienes se tomaban de las manos. Otros alzaban las velitas que les hicieron llevar. Parecía un rito de hace 500 años (Envidia).
De golpe y al ratito, se terminó todo. El padre Carlos advirtió, por las dudas: "el próximo domingo a seguir rezando", como si fuera una fecha del fulbo. Y salieron caminando, los señores creyentes. Tenían hambre. Después de tanta espiritualidad en defensa de dos sospechosos, era hora de irse a morfar (Gula y Pereza). Click aquí.
10 comentarios:
La unica iglesia que ilumina es la que arde. Arriba dios abajo la iglesia!
No hay ninguna duda cada día: la religión es el opio de los pueblos. Y la estupidez humana no tiene límites. Dime con quien andas y te diré quien eres.La resignación a ser majada, avasalla la creación de ser humano. Lo mejor que leí, un nombre: Fidel.
CRISTO
Crucificadle crucificadle /
crucificadle /
porque a su tiempo más debido / no ahorcó a los señores del hartazgo /
porque no dio cuchillos al genuflexo apóstol / porque repartió el agua de la humildad y el amor / en vez del ácido final / de la sedición
ROQUE DALTON
Qué payasada estos católicos, dan verguenza ajena. Son fanáticos sin remedio que no pueden ver mas allá de su nariz y les resulta fácil no hacerse cargo de algunas cuestiones, mejor dejarlo en "manos de dios". Si creen en la "justicia divina" también por ese lado se hará justicia.
Ese "padre Carlos" (Cipolla) es el mismo que en vergonzosa patoteada irrumpió con su manada de ovejas en la Cámara de Diputados cuando se trató la ley que reglamentaba el aborto no punible.
Dirigía el coro tal como un jefe de hinchada, un barra brava. Daba asco ver a ese hijuna gran puta gritando una consigna y todos los pobres seguidores (en su mayoría menores de edad) balando en coro.
Lo peor es que es el mismo que salió al principio a decir que el obispo no sabía nada (??), pero cuando se sabe todo sigue apoyando a un grupo de delincuentes.
El problema tiene una respuesta sencilla: quien, después de Galileo y Darwin, puede creer los inoncebibles mitos religiosos, ¡puede creer absolutamente cualquier cosa! (hablo de los creyentes, porque los curas son delincuentes o cómplices, igual que pasa con los pedófilos)
¿y por qué el cura este se escondía cuando los fotógrafos lo querían retratar, en la plaza san martín? Supuestamente no estaba haciendo nada malo
Señores, para que no quede todo en sólo puteadas a la iglesia y los curas, es posible BORRARSE de la iglesia católica. Los que fueron bautizados pueden presentar una nota al Obispo pidiendo que borren sus datos de todos los registros eclesiásticos. Muchos argentinos, españoles e italianos ya lo han hecho. La iglesia cobra subsidios por tantas ovejas que tiene en la manada. Acá están todos los datos:
http://argatea.com.ar/content/category/6/15/36/
Fielus inmensus... Cuantus lejus has quedatis de aquiellius pastoreous que fielmentis nois guaiabaran por bonas sendis... Aquiellius ejemplus vidis que fielmentensis mostrarius suas costumes impeterritus... Aquiellius ciertus clerigaes que caminabain, no tenianesa autienseis, predicabaen en domiciluis donader eran espectaes recibietris...en fin, erensiens verdaeriutes trasnimoreius de fe y esperanza...
No como los ahoriensis pregonitus...
Palabras Santis proninciatis por fielies creyentis verdaderitis... (Textuallis)
Padre, perdónales, no saben lo que hacen...
Amen.
Es cierto, anónimo de 14:04. Yo lo hice el año pasado y recibí una nota respuesta de Brédice (no, no, es una lástima pero no era Leticia) en la que tomaba nota de mi apostasía y me hacía saber que instruía al párroco de mi pueblo natal para que me borre de los registros bautismales.
No tengo idea de si lo cumplió o no...
Es cierto, anónimo de 14:04. Yo lo hice el año pasado y recibí una nota respuesta de Brédice (no, no, es una lástima pero no era Leticia) en la que tomaba nota de mi apostasía y me hacía saber que instruía al párroco de mi pueblo natal para que me borre de los registros bautismales.
No tengo idea de si lo cumplió o no...
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