A raíz de la presentación judicial que el ex intendente de Santa Rosa, Juan Carlos Tierno, realizó en la justicia pampeana para que sea levantado un blog alojado en los servidores de Google, y coincidiendo con la apertura de una oficina de esa empresa en América Latina, es pertinente reproducir las palabras del director de comunicaciones y asuntos públicos Alberto Arebalos, publicadas en el suplemento RADAR del diario Página/12."... pasa seguido que viene alguien y se queja del contenido de algún sitio o blog que no le gusta. Nosotros decimos cuáles son las cosas que no permitimos: incitación a la violencia, discriminación racial, sexual, religiosa. Ahora, si no viola ninguna de estas condiciones, ante la queja nosotros lo que decimos es: ‘Necesitamos el fallo del juez que diga que ese posting, por ejemplo, viola alguna ley local y nosotros sí lo vamos a sacar’. Porque entendemos que pueda molestar, pero también entendemos la libertad de una persona a colgarlo. Preferimos equivocarnos siempre para el lado de más libertad de expresión que para menos. Y tratamos siempre de no ser nosotros los árbitros del contenido".
Por supuesto que no es la primera vez que el irascible ex funcionario intenta cercenar la libertad de excpresión de quienes no concuerdan con él, o -dado el grado de poder que tenga en ese momento- directamente censurar. Pero no le ha ido muy bien: el caso que más retumbo público tuvo fue cuando intentó -vía judicial, inclusive, como en éste nuevo caso- coartar la libertad de prensa del mensuario Lumbre. En esa ocasión hasta pretendió que la Justicia impidiera a la publicación escribir su nombre en las páginas. Finalmente perdió el juicio.
Dados estos antecedentes, parece poco probable que el irritable doctor logre esta vez salirse con la suya. Acá un enlace con la nota completa.
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