"Justicia para Maxi y Darío"

Cerca de diez mil personas de distintas corrientes sociales se concentraron hoy sobre el Puente Pueyrredón para participar del homenaje a Maximiliano Kosteki y Darío Santillán, al cumplirse 8 años de sus asesinatos, todos con la consigna Eduardo “Duhalde candidato a la cárcel” y que “todos los responsables políticos sean detenidos”. 

Alberto Santillán, padre de Darío, destacó que “se están manifestando en paz y en calma desde la tarde de ayer cuando se efectuaron distintos actos para recordar a los chicos”. 

“Estamos acá porque desde el asesinato de los chicos, hace ya 8 años, pedimos justicia. Eduardo Duhalde, quien por aquel entonces, 26 de diciembre de 2002, era presidente de la Nación y Felipe Solá gobernaba la Provincia de Buenos Aires. Ellos son los responsables políticos directos”, acotó Santillán. 

Varias columnas del Polo Obrero; de Frente Popular Kosteki-Santillán, del Movimiento Aníbal Verón, del Movimiento Barrio de Pie, entre otras, enmarcaban el lugar con pancartas y carteles, en su mayoría pidiendo “Justicia para Maxi y Darío”.

Maximiliano Kosteki y Darío Santillán murieron el 26 de junio de 2002 en las inmediaciones de la estación de trenes de Avellaneda tras haber participado de un marcha que fue reprimida por la policía. 

Por sus muertes fueron detenidos y luego juzgados el ex comisario Alfredo Fanchiotti y el cabo Alejandro Acosta pertenecientes a la Policía Bonaerense. 

Si bien estos dos policías, es decir los autores materiales, ya fueron condenados, ahora faltan los autores intelectuales (Duhalde, Alberto Atanasof, Juan José Álvarez, Jorge Rubén Matzkin, etc.). El ex comisario Alfredo Fanchiotti y su otrora chofer, el ex cabo Alejandro Acosta, fueron condenados a prisión perpetua por los homicidios de Santillán y Kosteki, otros seis ex policías fueron sentenciados con penas que van de los 10 meses a los cuatro años por haber sido hallados culpables de los delitos de encubrimiento agravado y usurpación de títulos y honores. 

El tribunal también pidió que se investiguen los vejámenes denunciados en la comisaría 1° de Avellaneda y si Jorge Vanossi y Carlos Soria incurrieron en falso testimonio. El fallo coincidió con las exigencias que la fiscalía y las querellas manifestaron en sus alegatos. No obstante, los familiares de las víctimas aseguran que ahora pedirán que se avance en la investigación de los autores intelectuales y los responsables políticos de aquella represión mortal. 

Paradojas de la justicia: el primer condenado por la Masacre del Puente Pueyrredón fue uno de los manifestantes que marcharon aquél 26 de junio. Hernán Gurián, militante del Partido Obrero, fue sentenciado a 18 meses de prisión en suspenso y a realizar tareas comunitarias, acusado de cometer “atentado grave y resistencia a la autoridad”. Los principales testigos que declararon en su contra fueron los policías imputados y procesados en la causa que investiga los asesinatos de los piqueteros Maximiliano Kosteki y Darío Santillán. Otra denuncia contra una de las víctimas: A Leonardo Santillán, el hermano de uno los manifestantes asesinados, le acusan de haberle gritado “asesino” al ex cabo Acosta, uno de los homicidas. 

Gracias a un fotografo: “Mirá que te estoy sacando fotos” le dijo un reportero gráfico al comisario Fanchiotti, que sólo le respondió con un insulto mientras se ensañaba sobre el cuerpo de Darío Santillán, que se desangraba tirado en el piso. Los fotógrafos Sergio Kowalewski y José Mateos, con sus imágenes, desbarataron la versión que pretendió hacer creer que Darío Santillán y Maximiliano Kosteki habían muerto tras un enfrentamiento entre piqueteros en el Puente Pueyrredón. Registraron la brutalidad policial: cómo Acosta y Fanchiotti apuntan a Santillán por la espalda en el instante previo a ser asesinado (foto), y cómo manipularon con saña los cuerpos de las víctimas.