Con el puntaje ideal, ganando bien todos los partidos de la primera fase, la Selección Argentina coronó hoy la ronda del grupo B en el campeonato del Mundo de Sudáfrica y se colocó en los octavos de final. El equipo comandado táctica y técnicamente por Diego Armando Maradona sorteó el último escollo que le quedaba para acceder a la siguiente instancia y le ganó merecidamente 2 a 0 a Grecia. Los goles fueron anotados por Martín Demichelis –que si necesitaba una reivindicación luego del error contra Corea, vaya si la tuvo– y por el titán Martín Palermo, cuando el partido se extinguía. Hasta la apertura del marcador, e inclusive luego, el arquero helénico Tzorvas fue figura. Este domingo a las 15:30 horas el equipo Nac y Pop juega contra Méjico. El otro clasificado del grupo es Corea del Sur que se medirá con Uruguay el sábado a las 11, luego de empatar con Nigeria 2 a 2.
El funcionamiento general del onceto albiceleste no se resintió, pese a los 7 cambios que introdujo Diego con respecto a la formación que había superado a los coreanos del sur. La selección manejó la pelota, los tiempos y los espacios desde el primer minuto del partido, y el esquema táctico dio los resultados esperados, aunque cortando un poco de clavos, claro.
En la primera parte (sobre todo) Verón fue el encargado de “juntar” la pelota de media cancha hacia atrás y darle un buen destino, ya sea abriéndola para la subida de Clemente Rodríguez u Otamendi (llegó a la línea de fondo en dos o tres ocasiones y entregó la pelota a un compañero pese a que su función es esencialmente detener al rival), metiéndola vertical hacia las posiciones de Messi, Agüero o Milito, o cuidándola con paredes cortitas con Bolatti, Maxi Rodríguez o algún defensor.
Si bien cabe la crítica de que quizás la albiceleste centralizó mucho el juego, también es cierto que Grecia se defendió bastante bien, dejando prácticamente diez jugadores para esa función y ubicando al longilíneo Samaras para que se arregle como pueda arriba. De todas formas, el equipo de Diego siempre dio la sensación de que en cualquier momento inflaba la red.
También vale decir que el equipo pitagórico pegó durante todo el partido y nunca intentó armar una jugada, ni siquiera cuando estaba en desventaja y quedándose afuera del Mundial; como finalmente sucedió.
Lo más aproximado que Argentina estuvo de anotar en el PT fueron mediante una arremetida de Agüero por la izquiera y luego un tiro de media distancia de Verón que el arquero griego logró desviar.
En el segundo parcial, además de un pequeño susto que el solitario Samaras –con ayuda de Demichelis que hasta ahí había jugado para un 10– los griegos, prácticamente, fueron extinguidos.
Para Argentina las cosas no cambiaron demasiado: a Messi lo marcaron (y golpearon) escalonadamente entre cuatro players helenos. Esto lo obligó a tirarse atrás y a un costado para tener contacto con la pelota, que mucho tampoco podía llegarle.
Promediando la etapa final, Maradona reemplazó a Maxi Rodríguez por un fresco Angelito Di María, pero las cosas no mejoraron mucho.
Uno de los mejores jugadores de la cancha, Mario Bolatti, tuvo su oportunidad con un remate dentro del área que el imbatible (hasta ese momento) Tzorvas contuvo. La nacional siguió buscando, a veces claramente y otras medio embarullada, hasta que Micho conetó un centro de un frentazo, que pegó en Milito y en el rebote el mismo zaguero argentino la agarró con un violentísimo remate a quemarropa que casi le arranca el arco al buen golero heleno.
Con las pulsaciones un cachito más calmas, el equipo siguió intentando. Messi, que había estado olfateando cerca de arco rival y que todavía no pudo convertir en lo que va de la Copa del Mundo, realizó una vertiginosa maniobra que lo depositó mano a mano con el arquero adentro del área, le pegó y la pelota se estrelló en la base del palo. En ese instante fue cuando se produjo un nuevo milagro, uno más, en la vida de ese singular baluarte que es Martín Palermo, quien había ingresado por Milito nueve (vaya casualidad) minutos antes: de derecha, con cara interna, el titán la puso en el segundo palo, lejos de Tzorvas. Y el gol fue festejado por todos los compañeros subidos arriba del buen tipo que es Palermo, del que aparece en los peores momentos, del que tuvo su chance de viajar a Sudáfrica, entrar para jugar diez minutitos y le pagó a Diego su confianza y su cariño con este gol.
Argentina ganó los tres partidos que jugó y está en octavos. Ahora todos miran a la selección de Diego. Ahora empieza el Mundial.
Síntesis:
Argentina: Sergio Romero (8); Nicolás Otamendi (7), Martín Demichelis (7), Nicolás Burdisso (7) y Clemente Rodríguez (7); Maximiliano Rodríguez (5), Mario Bolatti (8) y Juan Sebastián Verón (6); Lionel Messi (7), Diego Milito (5) y Sergio Agüero (7). DT: Diego Maradona.
Grecia: Tzorvas (7); Sotirios Kyrgiakos (5), Loukas Vyntra (6), Avraam Papadopoulos (5) y Vasilis Torosidis (5); Vangelis Moras (6); Alexandros Tziolis (5), Sokratis Papastathopoulos (6), Giorgos Karagounis (5) y Kostas Katsouranis (5); Georgios Samaras (7). DT: Otto Rehhagel.
Goles en el segundo tiempo: 32´ Martín Demichelis (Arg); 44´ Martín Palermo (Arg).
Cambios en el segundo tiempo: en el incio Nikos Spyropoulos por Karagounis(Gre); 9´ Sotiris Ninis por Katsouranis (Gre); 10´ Christos Patsatzoglou por Torosidis (Gre); 17´ Angel Di María por M. Rodríguez (Arg); 31´ Javier Pastore por Agüero (Arg); 35´ Martín Palermo por D. Milito (Arg).
Amonestados: Kostas Katsouranis (Gre); Bolatti (Arg).
Arbitro: Ravshan Irmatov (UZB).
Estadio: Peter Mokaba, de Polokwane.
3 comentarios:
con mexico va a ser dificil pero pasamos, y no saben como van a estar los que dijeron que maradona no tenia ni idea de futbol.
mira que hay que decir boludeces.
Maradona y Cristina es lo mejor que nos ha pasado!!Aguante Argentina!
el diego y el che lo mejor que hemos tenido, los ricos k son de lo peor junto con menem y los milicos de lo que nos ha pasado.
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