Cantalo cantalo cantalo!

El gol de Leandro Gracián para poner en ventaja a Independiente 2 a 1 ayer contra Bánfield (al final le metió otro más) fue tan pero tan fulminante –además de espectacular– que ni siquiera se transmitió en directo. La televisión pública puso la repetición del tiro mientras el tablero todavía estaba 1 a 1. Ni el comentarista Alejandro Apo lo podía creer y se trabucaba, los del Taladro se quedaron parados en la salida de media cancha y Gracián, astuto, aprovechó la distensión (más notoria y fatal en el arquero Lucchetti que en nadie) y se la clavó en el arco desde 50 metros.
Cómo habrá sido de rápido y furioso el tanto del Tano que si se observa detenidamente el video, abajo a la izquierda, sobre el final del corto, un hincha de Bánfield pasa de la gloria a la depresión en el mismo instante: el festejo con los brazos en alto y el bocho sostenido por las dos manos, casi al unísono.