Alguna vez me tenía que pasar

Se me descajetó la rueda de sintonizar (no tengo ni quiero tener una mierdita digital que para cambiar de radio tardás media hora. Si, ya sé, las podés memorizar, lo cual te lleva una hora y media). La cosa es que cuando estaba llegando a la frecuencia deseada….. ffffffggggggggjjjjjjjjj a la mierda!!!!!. Tomaba un poco de carrera (con el sintonizador) y cuando estaba a un milímetro ffffffffggggjjjjjj otra vez. ¡Me cacho!.
Bueno, en fin, terminé escuchando un reportaje que le hacía por teléfono el caradura de Adrián Medina, ¡ex director de Canal 3 hasta que lo sacaron de una patada el el culo! entre otros curros por el estilo y aspirante (en el más temerario sentido de la palabra) a “comunicador”. Del otro lado del cable estaba el jefe de programación o algo así (Martín Bonavetti, se llama el pobre tipo) de ¡Canal 7!. Y parece que son re re re amigos.
De lo que hablaban no viene al caso y ni siquiera es relevante. Pero igual les cuento: resulta que ahora el “mientras venga de arriba soy capaz de cabecear un ladrillo” Medina está a favor de la nueva y cristina ley de radiodifusión (todo así en minúscula). Porque este tipo de tipos siempre están a favor o en contra de algo. O alguien (en "alguien", más vale están siempre a favor). Lo cual explica el porqué de que nunca será un “comunicador” como la gente. Por supuesto que el de Canal 7 estaba re contra a favor de la cristina ley, tal como sus superiores se lo ordenaran oportunamente. O capaz que no se lo ordenan, pero igual tiene que estar a favor.
Encima se tuteaban todo el tiempo y el impresentable de Medina le terminaba diciendo “gracias por devolverme el llamado, Martíiiiiin”, o sea que le hizo pagar al tipo la comunicación (en realidad si es el capo de ATC, los cospeles los termina pagando… ¿a qué no adivinan quién? De paso les comento que Medina es tera famoso por lo pijotero).
Ni en pedo voy a ser tan hijo de puta de decirles en qué radio escuché esto, ni a qué hora, ni como se llamaba el vomitivo envío, ni nada relacionado. Es más, les voy a dar las mil gracias por dejarme que se los cuente, amigos. (Encima busco en internet una foto y hay como 2 millones de ñatos que se llaman Adrián Medina, pero este salame no está. La puta que me parió).

L.G.