Piden reestatizar LU33

El intríngulis por el control (y también la vida) de LU33 Emisora Pampeana, que fuera la radio más fuerte de la provincia, parece no desenredarse nunca. Ahora los empleados le pidieron al Comité Federal de Radiodifusión (ComFeR) que le quite la concesión de la emisora al mendocino Eduardo Catena y que vuelva al órbita del Estado provincial.
El tema es más o menos así: el anterior dueño, Luis Legnani, le vendió la empresa a una sociedad anónima. Quien aparece como el dueño de LU es Catena, quien a su vez ni figura como miembro de dicha organización.
Como Catena (al igual que la mayoría de los propietario de los medios de comunicación) es un empresario y no un periodista o alguien relacionado con la comunicación como un servicio y no como un negocio, le importan tres carajos la radio en tanto y en cuanto no le deje plata.
Y como evidentemente no le está dejando ganancias que lo mantengan conforme, comenzó a recortar por lo que menos le preocupa: los sueldos.
Como será de retorcido el tema que la licencia de la emisora continúa en manos de Legnani, quizás porque no es lo mismo transferir una radio que un kilo de papas.
Ante este panorama un tanto desolador, los trabajadores de LU33, es decir una treintena de personas, se encontraron con una situación única e inmejorable de tomar el control de la radio; legalmente hablando, claro. Porque, se sabe, de las crisis siempre surgen nuevos horizontes.
Los trabajadores, a través de sus representantes gremiales se reunieron la semana pasada con el jefe del ComFeR, Luis Lázzaro en Buenos Aires para solicitarle que le saque la licencia a Catena y se reestatice el medio.
El funcionario, con bastante buen tino para lo que estamos acostumbrados, les recomendó que formaran una cooperativa y se hicieran cargo de la administración, como pasó con la fábrica Zanón y con el hotel Bauen, entre otros casos de control obrero. Pero los empleados dijeron que no. Se ve que prefieren ser empleados estatales y no ponerse los pantalones largos y manejar un medio de comunicación masiva.
De todas formas el vaciamiento de la empresa, ya comenzó. Sino fíjense acá.