Alicia, maravillas y no tanto

Ha habido críticas a la versión Tim Burton de "Alicia" porque -le reprochan- no respetó del todo el texto adaptado, como si eso fuera obligación. También le han caído porque el final no tiene nada que ver con la historia y esas escenas de Alicia peleando contra un monstruo dinosáurico hacen un ruido feo. Otros cuestionamientos se han oído porque la protagonista termina abandonando su candidez y las tendencias demenciales y delirantes -que en teoría la acercan a ser una buena persona- para sugerir negociados en Oriente.
También se han hecho múltiples referencias, desde ya, al impresionante despliegue marketinero y de recursos económicos publicitarios para imponer el "éxito", a tal punto que -en lo que es un hito histórico- una propaganda de la película llegó a ocupar la tapa del diario Los Ángeles Times, tal como muestra la imagen con Jhonny Depp en la piel de El Sombrerero Loco.
Pero lo que se ha dicho poco es otra cosa: la película no alcanza los índices de creatividad y fantasía que se esperan de un tipo como Burton, y encima sobre una obra literaria que le abre las puertas a posibilidades lisérgicas inimaginadas.
Lo peor que le podía ocurrir a "Alicia" le ocurrió: es un filme aburrido, previsible, con un ritmo que a lo mejor es el indicado para que los chicos vayan entendiendo la historia pero que la vuelve monótona y carente de sorpresa.
Desde ya que también tiene algunos momentos geniales, escenas memorables de un humor extraordinario. Pero esos instantes son más bien excepciones dentro de una historia que respeta en exceso la cronología y a la que le falta el sello que Burton le ha impuesto a otras obras de su autoría, y que lo han hecho ser quien es.
Un detalle no es menor a la hora de esta mirada, ¿eh?: una cosa es ver la película como corresponde y otra verla en el Cine Don Bosco de Santa Rosa, sin la posibilidad de los ridículos pero adorables anteojitos de 3D, y encima hablada en castellano, con lo que -ante la ausencia de las voces originales- se pierde una buena porción de lo encantadora que puede ser una película de este tipo.
Así y todo, la verdad, "Alicia" en manos de Burton amenazaba con ser una bomba, una explosión de colores, ideas locas y fantasías estrambóticas. Y sin embargo...

J.P.G.