Si en vez de ser el despacho del rector Sergio Maluendres hubiera sido el del abogado Charly Iglesia, ya habrían denunciado con bombos y platillos la existencia de una suerte de "engualichamiento". El asunto es que -según parece- el miércoles pasado extraños se metieron en la oficina del Rectorado de la Universidad Nacional de La Pampa. No se robaron nada, pero instalaron el misterio. Y como a Maluendres también suelen encantarle los misterios, le dio al episodio un poco más de simbólico secreto.
El hecho -que escondieron durante algunos días- lo publica hoy El Diario, y no suena tan raro que hayan hecho desorden, ni que hayan revuelto papeles, documentación y armarios. Más extraño es que, además de volcar una botella de champán que había en el lugar (aparentemente un regalo) también le hicieran una cruz al rostro del propio Maluendres, sobre una fotografía que estaba en un portarretratos.
¿Qué significa eso? ¿Un "trabajito", como dicen las curanderas? ¿Un vulgar mensaje de un enemigo político? ¿Una amenaza, un juego? Ay, ¿qué será, qué será?
2 comentarios:
A las mujeres hay que tratarlas bien. Sino se enojan.
seguro q fue la betty dailon...
Publicar un comentario