Al Barça se lo ve muy bien

Uno de los partidos más esperados de los últimos tiempos dejó a los televidentes que tienen el servicio de cable con la boca abierta: no por lo que juega el Barcelona -eso hubiera sido un encuenta- sino porque el promocionado derby con el Real Madrid no lo pudieron ver, ya que no fue televisado por esa vía.
Se perdieron, entonces, otra demostración de buen fútbol del equipo que dirige Pep Guardiola, que comanda en la cancha ese jugadorazo que es Xavi y en el que Messi sigue brillando.
Un tanto del delantero argentino en la primera parte y otro de Pedro, en el segundo tiempo, le dieron la victoria a los catalanes.
Los que pudieron disfrutar del partido, vía Direct TV o metiéndose en algunas paginolas de Internet, observaron una clara superioridad de los visitantes en el estadio Bernabeu.
Messi hizo un golazo: él mismo concibió la jugada al sugerir que se juegue rápido un tiro libro, tocó en pared con Xavi, que le bombeó un pase delicioso hacia el vértice del área chica. Messi, veloz como ninguno, la bajó de pecho -y en el mismo movimiento rompió la resistencia de un defensor- y definió de derecha, pegándole abajo.
Pedro, en el ST, también hizo un golazo al aprovechar otro pase maestro, una nueva distracción defensiva de los merengues y colocando un zurdazo bajo contra el segundo palo.
El Pipita Huigaín casi no tuvo opciones para marcar (Cristiano Ronaldo está cada día más egoísta). Fernando Gago la vio pasar más de lo que la agarró (tuvo que cometer demasiadas faltas en la mitad de la cancha) y Gaby Milito cumplió en la zaga barcelonesa antes de ser reemplazado por un golpe en la rodilla.